Palabras de bienvenida

En la octava década de mi vida al fin de me decidí… Por largo tiempo había abrigado el deseo de ¨colgar¨ una página en la red que pudiera albergar mi producción intelectual de tantos años y en la cual mi familia,  amigos, alumnos e interesados pudieran encontrar el producto de mis desvelos…

Un blog como un libro, cualquiera que sea su asunto, considero que es también una autobiografía del autor, pues en él se conjugan hechos aislados, aconteceres y pareceres que muchas veces parecen una colcha de retazos; y si esta manta tiene alguna coherencia reflejará los avatares de la vida del autor.

He sido y soy médico de vocación forjada en el contacto con los enfermos, inicialmente de un hospital público y luego de la conjunción armoniosa del trabajo con un hospital privado. Ello me ha permitido entrar y estar en contacto con las penas de los poderosos, pero también con las miserias de los que nada tienen. Sobre ese tema he escrito mucho, aunque me temo mis palabras no han tenido la trascendencia necesaria.

El común de las personas no queremos conocer ni sentir como en carne propia las desgracias de otros menos afortunados. Mis editoriales del Boletín Virtual de la Academia Nacional de Medicina tienen mucho que ver con la esencia del ser médico pero también del ciudadano comprometido con enseñar lo que cree que a otros podría interesar.

Luego de mi viaje a Cuba en 1993 formando parte de una Misión Humanitaria Internacional para investigar la causa de una epidemia de ceguera que llegó a afectar cerca de cincuenta mil personas, comprobé y confirmé mi sospecha de que la revolución cubana era un “gigantesco fraude”, su medicina publicitada como la mejor de Latinoamérica escondía profesionales sojuzgados, desactualizados y mal formados, sin bibliografía al alcance de sus manos ni posibilidad de ascenso intelectual. Dos artículos publicados en la Gaceta Médica de Caracas y  accesibles en este blog podrán informar a los interesados.

Años después de mi regreso envié una carta pública al embajador de Cuba (04.03.2001) y desde entonces dediqué mi esfuerzo a defender la medicina nacional de esa impúdica penetración extranjera contra toda ley y derecho a través de la fracasada Misión Barrio Adentro y médicos venezolanos traidores a sus tradiciones y a su patria. Comencé a escribir en el Diario El Universal artículos semanales durante 5 años que podrán leer si estuvieran interesados en esta triste realidad.

Mis libros, ¨Primum non nocere, primero no hacer daño, vivencias de un médico del Hospital Vargas de Caracas¨ (2004) y ¨Viñetas biográficas de un médico y humoradas peregrinas de medicina¨ (2015) igualmente estarán incluidos progresivamente.

Una parte muy importante de mi actividad profesional es la neurooftalmología, puente de unión entre la neurología clínica y la oftalmología sistémica que ha ocupado mis esfuerzos, angustias y logros pues he sido el fundador de esta especialidad en Venezuela. Como todo se inició por el estudio del fondo del ojo, venero de información, ofreceré a mis alumnos y a aquellos interesados una introducción a su estudio que los lleve paso a paso a una instrucción y les mostraré una colección personal de cuadros oftalmoscópicos. Igualmente en algún momento ingresaré a la página múltiples conferencias en Power Point que incluyan un curso de fundoscopia en la enfermedad sistémica.

Siendo el creador de un segmento intitulado ¨Perlas de observación clínica¨, actividad  que propuse en el seno de la Academia Nacional de Medicina de Venezuela mostraré aquellas que han sido publicadas en el seno de la Corporación.

Quiero mostrar pues el latido de mi vida personal como médico, ciudadano, profesor universitario y académico siempre agradeciendo la presencia y ayuda efectiva de mi esposa Graciela inseparable compañera en la aventura de mi vida labrada con trabajo, seriedad y honestidad.

Muchas gracias por leerme y por enviarme los comentarios que juzguen convenientes.

Dr. Rafael Muci-Mendoza

 

Caracas, julio de 2016